Opinión: ¿De qué forma un caballito de mar ayudaría al turismo de Penco y a sus artesanos? Que un collar con un hipocampo dorado se comercialice como recuerdo y para las damas

Cuando uno va de visita a otra ciudad o región, hay puntos donde el turista puede comprar Souvenirs (Recuerdos) para llevarse “un pedazo” del lugar que recorrió en vacaciones.  De hecho, en Concepción se puede encontrar (adentro de la Galería Universitaria) un kiosco donde los visitantes pueden comprar algunos recuerdos propios de la ciudad. En Penco no se ve muy potencializado el comercio de Souvenirs, y ¿si vieran en la municipalidad que esto no es rentable?, la Cámara de Comercio lograría convocar a todos los comerciantes que tengan local cerca de la playa para que en sus dependencias se vendan recuerdos u objetos típicos de Penco. 

En cada verano se realiza la Semana Pencona, y siempre vemos como la municipalidad realza el ícono de “un caballo de mar” ¿Verdad? ¿Y porque no…..incentivar a los artesanos de la comuna, a diseñar o confeccionar collares con la figura de un caballo de mar? Vean esto. Podrían venderse para las mujeres un collar, donde se vea colgado un caballo de mar y ojalá pintado con color “dorado”. Pero para darle cierta originalidad a este producto, por debajo del caballito debiera aparecer la palabra “PENCO” como una forma de indicar que aquella mujer “alguna vez veraneó en la playa pencona”. Esto podría venderse en todos los negocios cercanos a la playa, sobre todo los ubicados por calle Maipú (Entre Cochrane y Freire), siempre cuando el alcalde o la municipalidad respondan a esta iniciativa con que es caro mantener un kiosco para vender recuerdos a la entrada de la playa.

¿Les cuento una infidencia? Hay funcionarios municipales que se toman su café, en un tazón donde tienen estampada la imagen del Fuerte la Planchada. Es posible ver en el edificio de oficinas públicas Ema Stowash que en el tercer piso (en la parte del Infocentro) hay un ingeniero informático que trabaja para “la muni”, y siempre se le ve cargando un tazón con alguna imagen turística de Penco. A los pencones les conviene manifestar su orgullo de ser pencones, el cariño que tienen por su tierra, pero sienten que comercializar con este tipo de tazones (Aunque en los mejores tiempos de Fanaloza se hacía eso) sería una perdida económica. Es por eso que mandan a estampar una imagen de la playa, solo por consumo particular.  

Ojalá los artesanos de Penco consideren la posibilidad de fabricar caballitos de mar pequeños, pintados de dorado o plateado, para que con un cordel se les vea colgando con la palabra “Penco” (por debajo de la figurita), y ojalá se vea brillante en los bronceados pechos de una veraneante mujer. Así los 14 de febrero serán realmente lindos cuando un galán compre en el kiosco estos collares, y poder declararle su amor a su amada….regalándole un genuino caballito de mar pencón. PENCO ES AMOR ¿¡NO!?         

Playa de Penco (2016)