Luego viene el momento en que el pasajero debe pagar su pasaje, todo bien hasta que el chico (que al final era estudiante) le muestra su pase escolar.
El conductor cambia rotundamente de reacción y frena la micro, obliga al chiquillo a que se baje.
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Chofer (De forma muy grotesca):- ¡¡Bájate!!
Joven:- Pero ¿Qué sucede?....¿que hice? sólo quiero pagar mi pasaje
Chofer:- ¿Te podi's bajar porfa?
Y entre tanto alboroto, se acerca otro pasajero para calmar los ánimos.
Otro pasajero (Hablándole al chofer):- ¿¡ Le puedes aceptar la plata al cabro porfa !?
Chofer:- ¿Como no vay' a cachar que este mocoso anda puro sacando la vuelta no más? Ja ja, seguro va a pasar la tarde con la polola
Pasajero:- Sólo acéptale la plata, ¡punto!
Chofer:- Ya, ¿¡y porqué poh'!? JA! ja ja!
Pasajero:- Es simple y sencillo, EL CLIENTE SIEMPRE TIENE LA RAZÓN.-
FIN
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