Tras la rutina de la Opinión Política Ciudadana, tres posturas están a su disposición: a) Egoismo, b) Crítico equilibrado y c) Critico fanático ....

Este no es un comentario 100% político, se intenta apelar al sentido "humano" y natural de quien espera un país mas justo (Desde los dos bandos: izquierda - derecha). 

            Las injusticias existen, desde que muchas personas deban levantarse a las 3:30 AM para hacer fila en el consultorio a las 5 o 6 Hrs, hasta ¡incluso! para buscar trabajo muchos meses pese que terminaste una carrera universitaria. Pero el fanatismo político 24/7 no siempre es sano, porque cada persona también tiene derecho a darse un gustito de vez en cuando (y con lo que está al alcance de su mano).    

Desde Octubre del año 2019 (Fecha del Estallido Social) hemos visto como la ciudadanía se empodera a la hora de opinar en Twitter sobre Política, y de los dos lados (Izquierda y Derecha). Por un lado está bien que la gente opine ya que eso también promueve el desarrollo de un país, ¡ahora! Que los empresarios no lo validen eso es otra cosa.       

Pero cuando el fanatismo político nos saca el lado mas "pasional" de nosotros, hay un momento inesperado en que redundar sobre lo mismo llega a aburrir (Efectos espontáneos de la psicología humana, parte de nuestra naturaleza). Y de ahí llega un mensaje amigable que igual cumple su propósito, que es el de “frenarnos”, ¡fijense!... 

“Yo en verdad no entiendo porque ocupamos minutos de nuestra vida hablando de los políticos, sea de Gabriel Boric o José Antonio Kast. Al final los políticos nunca nos van a dar nada ¿¡O es tonto lo que estoy diciendo!?”

  Si bien logras calmar tu corazón con eso, hay gente que lee tu opinión cuando decides twitearlo en Twitter (Valga la redundancia). De ahí recién te percatas que ese enunciado es algo egoista, y rompe un poco con el espíritu legitimo de lo que significa luchar por una vida mas digna. De ahí, ya mas calmado y menos eufórico, asumes que es super legitimo la forma de cómo la ciudadanía pide cambios.

La clave está entre “luchar contra las injusticias de forma equilibrada” versus “luchar contra las injusticias de forma excesiva”.

¿¡Se fijan!?

Vean. Cuando luchas u opinas de forma equilibrada, es porque estás asumiendo que tampoco puedes estar las 24 Horas de los 365 días redundando en lo mismo.  Ya que como persona, aun con las barreras e injusticias de la vida, tú mereces de vez en cuando un pequeño bálsamo para capear esa rutina gris que te tienta al fracaso, a la derrota o a la angustia. Es un derecho divino reír y amar, en forma sana.

En cambio, cuando luchas de forma excesiva y con un fanatismo evidente, te estás postergando como persona. Una cosa es que asumas que el sistema o el gobierno no está garantizando esas mejoras particulares que cada ciudadano o sector pide. Pero el mal síntoma de esto es cuando la persona se muestra resentida, amargada o prejuiciosa, siendo negativo porque ve que la mayoría (que no es anarquista como el) se está dejando influenciar por un Satanás camuflado, detrás de la televisión o la publicidad. Esa rabia que comienza con un sueño frustrado suele aumentar cuando la persona se deja seducir con la ideología, pero a la vez no se preocupa de si mismo.

Que las injusticias existen, ¡efectivamente! Pero da la impresión que se es mas claro en el argumento, cuando en tu tiempo libre….te das un "recreo" de sentir por minutos esas ricas sensaciones de cosquillas, paz y “felicidad” (Con elementos que tengas al alcance de tu mano).  

La clave es NO POSTERGARTE, tu vida también te pide "emprender" y hacer cosas productivas.