Eran las 22 horas de un día sábado cuando una mujer cuarentona, que es casada, tomaba su Smartphone. Se metía a la aplicación "Whatsapp", y empezaba a escribirle a su marido.
Lo que pasa es que este socio había salido para ver el partido de Colo-Colo, que jugaba su partido en la tarde, y tiene la costumbre de juntarse con amigos al interior de una cantina. Pasa que ese boliche cierra una hora antes (21 horas), y el tipo aun no llegaba a casa, lo que generó preocupación en su amada esposa.
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Esposa (Alicia):- Pablo, ¿estás?
Y al otro lado, el Pablo estaba tomando cerveza en casa de un amigo sin intenciones de irse. Le sonaba el teléfono, e inmediatamente este flaco miraba los mensajes de su mujer que le llegaban a Whatsapp.
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Pablo:- Dime
Alicia:- Oye Pablo, ¿dónde estay? ya es tarde ya poh', si yo sé que cierra la botillería.
Pablo:- Estoy en casa del Rodrigo, tomando una cervecita
Alicia:- ¿Cuál Rodrigo?
Pablo:- Un compañero del colegio, el que tocaba el violín, al que lo molestábamos harto cuando éramos chicos poh'
Alicia:- Buta, vay a estar todo curado....¿Sabis? no te conviene pescar el auto pa venirte
Pablo:- De hecho, yo no voy a ir para la casa ahora. Me tomé unas tres copas recién
Alicia:- Buta, ya ¿y porque con esa persona?
Pablo:- ¿Y que tiene?
Alicia:- Buta, te creo si lo hubieras hecho con el Rubén que es tu mejor amigo. Pero la semana pasada, más que pelaste por detrás al Rodrigo. ¡Si yo no soy tonta tampoco! Él no te cae bien
Pablo:- Es que de repente lo fui a visitar, y echamos la talla....se dieron las cosas.
Alicia:- No te creo nada, ¡estay con otra galla weón!....me estay poniendo el gorro.
Pablo:- No, si es verdad. ¿Te lo paso?
Alicia:- ¿Me vas a pasar con Rodrigo?
Pablo:- Si poh, te lo paso.
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Y el Pablo llamaba a Rodrigo
Pablo:- ¡Oye weón! ¡Ven!
Rodrigo:- Dime
Pablo:- Mi señora quiere hablar contigo
Rodrigo:- Ah que bien
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Rodrigo:- ¿Aló?
Alicia:- Aló ¿Rodrigo?
Rodrigo:- Si? Alicia?
Alicia:- Si poh, hola ¿cómo estay? ¡mira! quise hablar contigo, porque pensé que mi marido me estaba engañando
Rodrigo:- Ja ja ja, no pasa nada. Tu marido no está en mi cama, más bien quiso tomarse unas cervezas conmigo y acompañarme
Alicia:- Ja ja ja jua, oye amiguito, y ¿estás pololeando?
Rodrigo:- No, estoy solo. De hecho por eso tu marido me quiso acompañar
Alicia:- Y a que te dedicas? -
Rodrigo:- Hace dos años encontré una peguita de junior, y así logro pagar mis cuentas
Alicia:- Ah mira, me acuerdo que cuando eras chiquitito...eras como el mas calladito, casi como...pernito
Rodrigo:- De hecho, estaba haciendo maquetas de barco, cuando por fuera siento que suena la bocina de un Station Wagon, y era tu marido que vino a visitarme. Incluso el me pasó los billetes para que yo fuera a comprar las botellas de cerveza-
Alicia:- Ahhh....o sea, tu no lo invitaste a tu casa
Rodrigo:- No poh, tenía que ir a la iglesia de hecho....pero como llegó mi único amigo, nos pusimos a carretear. Hacía años que no probaba una gota de chela
Alicia:- Ah mira tu, ya amiguito...te tengo que dejar, pasame con Pablo por favor. Que estés bien ¿ya?
Rodrigo:- Vale chaito
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Y Rodrigo le devolvió el teléfono al Pablo.
Pablo:- Viste? Acá estoy con mi compadre, el Rodrigo
Alicia:- Pablo, Rodrigo me dijo que el nunca te invitó a su casa. Tu llegaste a donde él, y la idea de que se juntaran a tomar era tuya, ¿que te pasa weón?
Pablo:- Ja ja ja, naa...estamos compartiendo, conversando un ratito.
Alicia:- Rodrigo no toma, y lo interrumpiste en su deber como evangélico, no fue al culto por tomar contigo. Yo sé que el pobre cabro no te cae bien
Pablo:- Yaaaaa...ja ja ja, oye amor, ya voy por la cuarta copa ¡Nos vemos!
Alicia:- ¿De quien te estay arrancando weón? ¡Dime la verdad! -
Pablo:- Ya sabis, que en la casa se está alojando tu mamá. No la soporto. Chao!
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