Bien sabemos que la sopaipilla es un producto tan típico en Chile, y además económico. Si bien no es un alimento que frecuentamos servirnos todos los días, pero en promedio degustamos su sabor ¡una vez a la semana! (es como el condimento para regalonear un domingo por la tarde).
Ya se sabe que cada persona tiene su propio
estilo para freír una masa y convertirla en sopaipilla. Sin embargo, algunos
tienen la capacidad de hacer un pedazo de masa redonda y que tenga el mismo
tamaño de la base (inferior) de un tarro de Nido ¿Se entiende? ¡Un circulo
grande pues!
Pero la gracia de comer una sopaipilla grande,
es que el alimento debe tener un grosor grueso de masa....no tan grueso como el
pan (la hallulla) pero que con sólo masticar un pedazo sientas algo de masa en
el paladar, independiente si comes lento o si eres algo ansioso al tragar.
¡Bien! Los que son expertos en hacer sopaipillas grandes y de buen grosor (que no sean muy delgaditas) son los penquistas, concretamente los que viven en la comuna de Concepción. Sobre todo los que ofrecen este rico producto a "los cabros" que vienen saliendo de clases (de la Ú).
Tanto en las afueras de la Universidad Católica
(UCSC) como de la Universidad Andrés Bello (En el sector Brisas del Sol,
Talcahuano) es posible encontrar carritos de vendedores que ofrecen sus más
ricas sopaipillas. ¡Ojo! Nunca falta la mayonesa ni la palta. Ahí el valor
agregado.
La famosa "pasarela de la cato" |
Estos eran los precios que tenía el hombre para
vender dichas "cositas ricas". Una sopaipilla sola te la vendía a $
200, aunque si querías le echabas algo de mayonesa. Aunque la que venía con
palta te costaba $ 350 cada una ¡Adivina! Tenías derecho a ponerle un poco de
mayo.
Entonces, uno de los recuerdos más gratos en
los dorados años universitarios (para quienes ya sacamos un tedioso título en
la Ú) es sin duda LA SOPAIPILLA CON PALTA Y MAYONESA. La forma que tenían esos
emprendedores para cocinarla marcaba la diferencia, ¡te subían mucho el ánimo!
Productos típicos en fiestas patrias
-
No hay comentarios:
Publicar un comentario