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El que nada hace...nada teme |
Gente perversa que lamentablemente usa la iglesia como fachada para esconder sus turbios intereses, y en esta historia vamos a destapar la olla de un inescrupuloso quien se quiso aprovechar de la paz de Viernes Santo para pretender "hacer sus cosas".
Esto pasó dos días antes de Viernes Santo
Daniel iba caminando por la plaza, cuando en el camino se encuentra con un pastor evangélico (¡ojo!, este predicador esconde algo pero de eso detallaremos más adelante).
El pastor le habla.
Pastor:- Danielito, hola ¿Cómo estás?
Daniel:- Ah, hola pastor. No lo había visto. Perdón, es que estaba distraído. No me siento bien.
Pastor:- ¿Pero que le pasó amiguito mío? ¿Sentémonos aquí en el asiento de la plaza?
Daniel:- Si, claro.
Pastor:- Cuénteme amiguito, ¿¡ Qué le pasó !?
Daniel:- Pasa que estoy chato, en mi barrio no se puede vivir. La cantidad de autos que pasan por fuera desde la mañana hasta la noche es terrible. La pobla parece Santiago. Me tienen bien agotado en verdad todos los ruidos molestos, ¡¡ son insaciables estos brutos !!
Pastor:- Tranquilo amiguito, ¿y no te puedes cambiar de casa?
Daniel:- Que no haría por juntar plata, pero tampoco encuentro pega
Pastor:- Bucha, pero hijo, este Viernes comienza Semana Santa. Esta es tu oportunidad para encomendarte al señor.
Daniel:- Si, es que en realidad, ¡lo que yo quiero!, es que los conductores de camioneta se dejen de molestar con los motores. Que sepan lo que es vivir en Pucón alguna vez en sus vidas, para que nos dejen reposar en paz.
Pastor:- Pero por algo pasan las cosas pué'. Hijo, ¡grábatelo muy bien en tu corazón! Dios sabe porque pasan las cosas. No es sano irte contra la corriente. Lo mejor es tomarse las cosas con humor.
Daniel:- No lo sé pastor.
Pastor:- Amiguito, pero no todo está perdido. Piensa que en Viernes Santo casi toda la gente aprovecha sus momentos de paz, en reflexión por las enseñanzas que nos deja nuestro señor Jesucristo.
Daniel:- En realidad no tengo nada en contra del flaquito
Pastor:- ¿Viste? Mira, espera que llegue el dia Viernes y viendo algunas películas vas a poner conectar tu espiritualidad.
Daniel:- A lo mejor tiene razón, voy a esperar que llegue el Viernes.
Pastor.- Me parece fantástico. Ya pue, lo dejo. Que tengas un bonito día ¿Vale?
Daniel:- Un gusto pastor, nos vemos.
-
Y en la noche de Viernes Santo
3 AM
Mientras en la televisión ya dejaban de dar películas de Semana Santa, todo el barrio estaba en silencio. No había fiestas, no habían carreras de auto. Todo en silencio relajante.
La única casa donde la luz aun se veía prendida, era en la casa de Daniel, y es que el muchacho decidió escaparse en el balcón del segundo piso para mirar el mar, así prendía un "puchito" (cigarrito) para escuchar en volúmen bajo algo de jazz. Sólo quería disfrutar su momento de relajo sureño.
De repente el pastor quien se había sacado la careta, andaba deambulando por la calle a esa hora. A Daniel le llama harto la atención que un pastor evangélico anduviera caminando de madrugada, y cargando en su brazo un paquete envuelto con papel "kraft"
Daniel le grita al pastor desde el balcón
Daniel:- ¿Qué anda haciendo a esta hora pastor?
Y el pastor convencido que no lo vería nada, se espanta, resulta que da vuelta la cabeza para ver a Daniel sorprendido en el balcón de su casa.
Pastor:- ¿Y tú?
Daniel:- ¿Va a casa de su.....amiga con ventaja?
Pastor:- Cierra la boca hombre, es Viernes Santo. No es momento para tus bromas de doble sentido. ¿Y tú? ¿No deberías estar durmiendo?
Daniel:- Estoy siguiendo su consejo mi amigo ilustre
Pastor:- ¿Qué consejo? Yo nunca te dije que te desvelaras, ¡mira la hora que es!
Daniel:- Usted me dijo que aprovechara Viernes Santo porque es un dia de paz y de reflexión, antes estaba estresado pero con este silencio de la noche, ¡me estoy sintiendo mucho mejor!
Pastor:- Ya, pero te dije eso para que vieras la película de Jesús, leyeras la biblia y luego te durmieras. ¡Ya! Anda a dormir hombre, que Dios se enoja
Daniel:- ¿Y usted? ¿Porqué tan nervioso? ¿A donde va con ese paquete?
Pastor:- ¿Cuál paquete?
Daniel:- El que anda trayendo en su brazo pues, el que va envuelto con papel "kraft"
Pastor:- ¡Ah esto! Mira, esto es para dejarselo a un cliente ¡Eso!
Daniel:- ¿Un cliente?
Pastor:- Si, un cliente. Ya amiguito, vaya a acostarse, me tengo que ir ¡Nos vemos!
Daniel:- Tranquilo zorrón. Si no le voy a decir a nadie
Pastor:- ¿Qué cosa? No te entiendo
Daniel:- Relajao loco. Si no le voy a decir a nadie que usted es weón
Pastor:- ¿Perdón? Te recuerdo niño mal criado que estamos en Viernes Santo. Para la otra, ¡¡ me respetas por favor !!, te recuerdo que yo soy un hijo del señor
Daniel:- Ja ja ja....ya, calmate hombre. Es que hay que ser harto aweonao para ir a dejar una encomienda en la oficina de correos. ¡Cht! ¿Y cuándo se ha visto que abran el local a las 3 AM de un feriado? ¡Weón weón! Parece que quien tiene que acostarse aquí es otro ¡Ya! Buenas noches no má' !
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