El Comité Nacional Pro Defensa de la Flora y la Fauna (Codeff) presentó denuncia en contra la empresa inmobiliaria Valmar, porque éstos últimos habrían intervenido en parte del humedal Andalién-Rocuant, ubicado en la comuna de Talcahuano. “La gota que rebalsó el vaso” fue la destrucción de varios nidos, de especies que habitan en el lugar, un evidente atentado contra el medioambiente que pareciera no importarle a empresas como esta.
Es consecuencia del crecimiento que han tenido las ciudades durante el último siglo. Si antes no fue tema esta invasión de inmobiliarias en las reservas naturales fue porque estas se ubican más allá de la simple periferia, ahora los “malls” expanden más una ciudad, y por durante 10 años los barrios encuentran sus límites como son los humerales. En 1985 la Autopista era una carretera más que unía a dos ciudades como Concepción y Talcahuano (este humeral de hecho queda cerca del casino Marina del Sol), ¿28 años después? Es una avenida mas, y de la misma forma el humeral en los 80s no formaba parte de ninguna ciudad.
Y esta es una clara muestra de cómo el progreso se expande hasta rincones que hace medio siglo fueron inimaginables, pero el error es de cada una de estas empresas en no saber distinguido entre zonas aptas y no aptas para la construcción de departamentos, centros comerciales o casinos. Están amenazados aquí el reino vegetal y animal, también es cierto que el humeral es uno de los pulmones de la ciudad.
Las autoridades y las empresas debieran buscar otras zonas donde construir, total Carriel Sur no es el único lugar del Gran Concepción.
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