ESTO ES CASI COMO RECORDAR LA PANDEMIA DE AÑOS ATRÁS, CUANDO MUCHOS NO RESPETABAN EL TOQUE DE QUEDA
Puede haber una serie de situaciones que ocurren en el día y que condicionan (u obstaculizan) el normal funcionamiento de la vida, como terremotos, estados de excepción o temporales. En algunas comunas hemos visto decisiones gubernamentales que han postergado o suspendido actividades para así no arriesgar la salud de las personas, sobre todo cuando un sistema frontal ha generado un sin fin de secuelas naturales.
Los temporales del presente mes de Junio (-2023) han ocasionado los siguientes estragos: suspensiones en viajes (o servicios de transporte), inundaciones en las calles, accidentes de tránsito, personas (familias o comunidades) totalmente aisladas, daños de viviendas, corte de caminos, cortes de energía, desbordes de ríos, navegación de botes inflables por las calles, suspensión de actividades deportivas, perdida de animales en los campos, entre los casos de emergencia más comunes. De hecho la localidad de Licantén (En la Región del Maule) es quizás la que más ha sufrido con este Sistema Frontal.
-
En el caso del Bio-Bío los lugares que más han padecido con el temporal han sido Los Ángeles (Mejor dicho, el sector “La Isla”), Hualqui, Cañete, Santa Juana, Laja, Tomé, Tucapel, Cabrero (O bien el Salto del Laja y alrededores), Arauco, Curanilahue, Alto Bio-Bío, algunos rincones de Concepción, etc. Todo eso da cuenta que tras el temporal hay muchos compatriotas que lo están pasando mal, razón suficiente para sentir algo de empatía cuando ellos únicamente requieren apoyo por parte de la sociedad.
Pero tanto en los días de fuertes precipitaciones, como años atrás con la pandemia, hemos conocido lamentablemente lo peor del ser humano como es el egoísmo y la poca conciencia. Esto se dice cuando hay sectores donde no ocurren estas tragedias climáticas, razón suficiente para que aquellos “afortunados” hagan relucir una supuesta inmunidad que raya hasta en lo grotesco. En noches donde hay comunidades que piden socorro la gente busca la forma de hacer su vida normal, algo que llama bastante la atención, sin importar incluso si allí está nevando.
Son partes donde no paralizan varias de sus actividades, peor aun no detienen sus vicios. ¿Podrá creer usted que el carrete o las salidas nocturnas de un sábado ni siquiera se detienen en climas hostiles? Más cuando la gripe surge muchas veces por el descuido de los pacientes. Es que realmente impresiona como hay gente que le gusta salir a la calle cuando las condiciones no dan para disfrutar de un paseo, jamás podremos ser tan “estúpidos” como para implorar que la tragedia llegue a esos otros lugares para que recién estos conductores que manejan bajo granizos tengan algo de freno, en su camino al vicio. Los inmunes.
Al final, algunos fiesteros carretean hasta las últimas consecuencias y no le temen a nada.
No hay comentarios:
Publicar un comentario