Un conductor de autobuses, muy grosero, grita a la gente:
-¡Vamos arriba, cornudos!
Un señor se le acerca y le dice muy educado:
-Le felicito. ¿Cómo ha sabido que yo soy un cornudo?
Pero, fíjese, yo tuve un hijo; luego marché dos años al extranjero y, cuando regresé, encontré que tenía dos hijos.... Entonces, al primero le dije: *Tendrás talento, y serás ingeniero*
y al segundo *tú eres un hijo de puta, por lo que serás conductor de autobús*
-¡Vamos arriba, cornudos!
Un señor se le acerca y le dice muy educado:
-Le felicito. ¿Cómo ha sabido que yo soy un cornudo?
Pero, fíjese, yo tuve un hijo; luego marché dos años al extranjero y, cuando regresé, encontré que tenía dos hijos.... Entonces, al primero le dije: *Tendrás talento, y serás ingeniero*
y al segundo *tú eres un hijo de puta, por lo que serás conductor de autobús*
No hay comentarios:
Publicar un comentario