Una micro del Gran Valparaiso, todas las micros que pasan en el centro porteño tienen recorrido a Viña del Mar, entre ambas ciudades la demora del recorrido solo es de entre 5 y 10 minutos.
"...Eugenio se subió aún entusiasmado a una de éstas -MICROS- porque quería conocer y recorrer dos de los lugares iconos y emblemáticos de Valparaíso: la Plaza Sotomayor y el Muelle Vergara. Se sentó alegre, y casi egocéntrico, a dos filas atrás del chofer, mientras éste manejaba en su volante a alta velocidad, y poníala música a todo volumen, cosa que los pocos pasajeros en el bus escuchaban el reggaetón “a todo chancho"..."
"...Eugenio se subió aún entusiasmado a una de éstas -MICROS- porque quería conocer y recorrer dos de los lugares iconos y emblemáticos de Valparaíso: la Plaza Sotomayor y el Muelle Vergara. Se sentó alegre, y casi egocéntrico, a dos filas atrás del chofer, mientras éste manejaba en su volante a alta velocidad, y poníala música a todo volumen, cosa que los pocos pasajeros en el bus escuchaban el reggaetón “a todo chancho"..."
Concepción es una ciudad muy poblada e importante de la zona centro-sur de Chile, y cuando el tranquilo sector de Chillancito presenciaba en Enero la soleada tarde de verano los buses transitaban por la calle Camilo Henríquez rodeados por la oleada de ruidos provocados por las motos y los autos enchulados.
Un joven se baña en la ducha de su casa, lleva muchos minutos ahí mojándose, es moreno de piel, macizo, alto y de 24 años, aparenta más edad pero en lo psicológico tiene la inocencia de un niño.
EugenioLama corta la llave del agua, sale de la ducha dejando caer gotas en el piso, y se afeita frente al espejo, se seca con la toalla, y se va del baño con algo puesto de la cintura a los pies pero sin ropa de la cintura a la cabeza. Subeal segundo piso, y en una silla tiene su ropa lista para vestirse, se pone polera negra de cuello redondo, blue-jeans azul, un par de zapatillas blancas, un jockey de color beige en la cabeza, y nunca faltan sus gafas negras, menos cuando se trata de viajar largos 615 kilómetros para llegar a la romántica ciudad-puerto.
Bajacorriendo al primer piso, entra al comedor y se sirve una taza de Café conuna paila de huevos revueltos, para servírselos con un pan francés. Una hora después sale de su casa,vive en un pasaje residencial y de clase media cercano al terminal de buses, y con una mochila puesta en su espaldava al“negocio” de la esquina para comprar una botellita chica de néctar con sabor a piña, ytambién un delicioso paquete de galletascon sabor a mantequilla, los cuales tiene pensado servírselos dentro del bus. Cuando el reloj marcaba las 22:00 horasel chico esperaba el bus, estaba ahí sólo pero entusiasmado (y no es para menos) en los limpios, silenciosos y vacíos andenes del Terminal de Camilo Henríquez.
Después de nueve horas ininterrumpidas de viaje llega a Valparaíso, una ciudad llena de edificios antiguos, sobre todo en el sector céntrico. Eugeniomiracuriosola densa neblina que dominaba las calles céntricas por la ventana, condición climática que combinaba con el día nubladoy con el frio matinal que tanto el sureño como el resto de los pasajeros sentían dentro del bus.Llegó al terminal rodoviario (donde había gente adentro del edificioy también afuera,en los andenes), y el trasnochado penquista baja del bus cuando la maquina llega al andén, antes de salir del lugarentra a la cafetería Paxin que está en la salida del terminal,allíse sentóa desayunar y sacó de su billetera un billete de mil pesos ($ 1000) para pagarel café y los dos sándwiches (de queso con jamón).
Camina por la vereda unas cuatro cuadras, pasando por el popular mercado El Cardonal (un tanto sucio), hasta llegar a la transitada Avenida Errázuriz (adornada con palmeras grandes en una de las veredas), aunque estaba un tanto precavido para asegurarse de que algún delincuente no lo asalte, luego cruzó la calle,y caminaa mano derecha unos cuantos metros, hasta llegar al paradero de buses que está al frente del campus universitario de la UCV (a este medio de transporte también seles llama “micros” como un chilenismo que se refiere al transporte urbano en las ciudades grandes), allí vio dos “micros” detenidas en la calzada,pues los conductores esperan sentados a más pasajeros que se suban a sus respectivas máquinas para quese les pague la tarifa, las monedas son parte de su sueldo.
Eugenio se subió aún entusiasmado a una de éstas porque quería conocer y recorrer dos de los lugares iconos y emblemáticos de Valparaíso: la Plaza Sotomayor y el Muelle Vergara. Se sentó alegre, y casi egocéntrico, a dos filas atrás del chofer, mientras éste manejaba en su volante a alta velocidady poníala músicaa todo volumen,cosa que los pocos pasajeros en el bus escuchaban el reggaetón “a todo chancho”.En un par de minutos el penquista se baja del bus, a 23 cuadras del paradero donde subió, después de que “la micro” recorriera una avenida media-curva tipo costanera, y en torno a la bahía porteña, entre todo el sector cercano al Terminal de Buses y la Plaza Sotomayor.
Pero esto fue solo una parte de todos los parajes urbanos, turísticos y culturales que Eugenio recorrió en Valparaíso (Ascensor Artillería), Viña del Mar (Avenida Valparaíso) y Reñaca (en el sector 5, y rodeado de argentinos veraneantes) durante el día. Y en el terminal de buses de Viña, con algo de frustración, tomó el bus a las 22:00 Horas,¡y se fue!
Concepcion is a very populous and important of the central-southern Chile, and when the quiet sector witnessed in January Chillancito sunny summer afternoon buses traveling along the street surrounded by Camilo Henríquez wave of noise caused by motorcycles and custom cars.
EugenioLama corta la llave del agua, sale de la ducha dejando caer gotas en el piso, y se afeita frente al espejo, se seca con la toalla, y se va del baño con algo puesto de la cintura a los pies pero sin ropa de la cintura a la cabeza. Subeal segundo piso, y en una silla tiene su ropa lista para vestirse, se pone polera negra de cuello redondo, blue-jeans azul, un par de zapatillas blancas, un jockey de color beige en la cabeza, y nunca faltan sus gafas negras, menos cuando se trata de viajar largos 615 kilómetros para llegar a la romántica ciudad-puerto.
Bajacorriendo al primer piso, entra al comedor y se sirve una taza de Café conuna paila de huevos revueltos, para servírselos con un pan francés. Una hora después sale de su casa,vive en un pasaje residencial y de clase media cercano al terminal de buses, y con una mochila puesta en su espaldava al“negocio” de la esquina para comprar una botellita chica de néctar con sabor a piña, ytambién un delicioso paquete de galletascon sabor a mantequilla, los cuales tiene pensado servírselos dentro del bus. Cuando el reloj marcaba las 22:00 horasel chico esperaba el bus, estaba ahí sólo pero entusiasmado (y no es para menos) en los limpios, silenciosos y vacíos andenes del Terminal de Camilo Henríquez.
Después de nueve horas ininterrumpidas de viaje llega a Valparaíso, una ciudad llena de edificios antiguos, sobre todo en el sector céntrico. Eugeniomiracuriosola densa neblina que dominaba las calles céntricas por la ventana, condición climática que combinaba con el día nubladoy con el frio matinal que tanto el sureño como el resto de los pasajeros sentían dentro del bus.Llegó al terminal rodoviario (donde había gente adentro del edificioy también afuera,en los andenes), y el trasnochado penquista baja del bus cuando la maquina llega al andén, antes de salir del lugarentra a la cafetería Paxin que está en la salida del terminal,allíse sentóa desayunar y sacó de su billetera un billete de mil pesos ($ 1000) para pagarel café y los dos sándwiches (de queso con jamón).
Camina por la vereda unas cuatro cuadras, pasando por el popular mercado El Cardonal (un tanto sucio), hasta llegar a la transitada Avenida Errázuriz (adornada con palmeras grandes en una de las veredas), aunque estaba un tanto precavido para asegurarse de que algún delincuente no lo asalte, luego cruzó la calle,y caminaa mano derecha unos cuantos metros, hasta llegar al paradero de buses que está al frente del campus universitario de la UCV (a este medio de transporte también seles llama “micros” como un chilenismo que se refiere al transporte urbano en las ciudades grandes), allí vio dos “micros” detenidas en la calzada,pues los conductores esperan sentados a más pasajeros que se suban a sus respectivas máquinas para quese les pague la tarifa, las monedas son parte de su sueldo.
Eugenio se subió aún entusiasmado a una de éstas porque quería conocer y recorrer dos de los lugares iconos y emblemáticos de Valparaíso: la Plaza Sotomayor y el Muelle Vergara. Se sentó alegre, y casi egocéntrico, a dos filas atrás del chofer, mientras éste manejaba en su volante a alta velocidady poníala músicaa todo volumen,cosa que los pocos pasajeros en el bus escuchaban el reggaetón “a todo chancho”.En un par de minutos el penquista se baja del bus, a 23 cuadras del paradero donde subió, después de que “la micro” recorriera una avenida media-curva tipo costanera, y en torno a la bahía porteña, entre todo el sector cercano al Terminal de Buses y la Plaza Sotomayor.
Pero esto fue solo una parte de todos los parajes urbanos, turísticos y culturales que Eugenio recorrió en Valparaíso (Ascensor Artillería), Viña del Mar (Avenida Valparaíso) y Reñaca (en el sector 5, y rodeado de argentinos veraneantes) durante el día. Y en el terminal de buses de Viña, con algo de frustración, tomó el bus a las 22:00 Horas,¡y se fue!
MERCADO EL CARDONAL, VALPARAISO.
"...Camina por la vereda unas cuatro cuadras, pasando por el popular mercado El Cardonal (un tanto sucio), hasta llegar a la transitada Avenida Errázuriz (adornada con palmeras grandes en una de las veredas),..."
"...Camina por la vereda unas cuatro cuadras, pasando por el popular mercado El Cardonal (un tanto sucio), hasta llegar a la transitada Avenida Errázuriz (adornada con palmeras grandes en una de las veredas),..."
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Concepcion is a very populous and important of the central-southern Chile, and when the quiet sector witnessed in January Chillancito sunny summer afternoon buses traveling along the street surrounded by Camilo Henríquez wave of noise caused by motorcycles and custom cars.
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