Especial 8-M: Cuando algunos titulares de prensa carecen totalmente de sentido común (Con su manera bastante particular para interpretar hechos de femicidio)

 

 En los últimos años varias personas de tendencia “feminista” (tanto de manera particular, como integrantes de alguna ONG’ en defensa de la mujer) han analizado un sin fín de portadas periodísticas que en su parecer son chocantes e inhumanos, todos relacionados con actos criminales de hombres que alguna vez le han quitado la vida a una dama. No se olviden que en el ámbito de las comunicaciones, “el lenguaje crea realidades”.

Hemos leído titulares como:

“Hizo anticuchos con la polola” (La Cuarta, año 2015) redactado para referirse a un sujeto criminal quien clavó con un fierro a quien fuera su pareja. Y la bajada era así: “Maldito le atravesó el fierro dieciochero a su amada en Arica: ¡Mujer se salvó de milagro y gil quedó preso!”

“El Pitbull y sus cachorritas” (La Cuarta) para referirse a un carrete del futbolista Gary Medel con dos amigas. La bajada continuaba de esta forma: “Detalles del manso carrete del Gary en su día libre de La Roja”.

“El amor y los celos la mataron” (La Cuarta) para referirse a un peligroso criminal descuartizando el cuerpo de una ciudadana colombiana quien además fuera su pareja. La bajada continúa así: “La historia de la colombiana descuartizada en crimen pasional”.

 También han habido titulares que derechamente fueron sacados de contexto, vean:

“Miss Gabinete. Carolina Schmidt (Sernam) sacó aplausos en presentación del equipo de Piñera” ¿Dónde está el error? Que el evento cubierto por el reportero gráfico no era precisamente un concurso de belleza, sino que el más formal y solemne acto gubernamental del Estado de Chile. ¿¡Se fijan!? Eso fue publicado en el diario Las Últimas Noticias (LUN).

Y seguimos recordando un último titular, igual de impactante que los anteriores:

“Iñora de Trump mostró todo su voto en fotos hot”, pero ¡ojo! que este titular de La Cuarta fue publicado en la misma portada (carilla) donde además salía otra noticia. Esta última era de una manifestación callejera en contra de la violencia machista con el lema “#NiUnaMenos”. Dos hechos moralmente adversos, aunque según agrupaciones feministas las modelos y promotoras también serían de alguna manera víctimas debido a que por formación o (mal llamada) cultura ellas forman parte de la “cosificación”, un elemento que ha sido inculcado mediante la publicidad y durante décadas. 

En realidad han habido otras portadas semejantes, sólo queda contextualizar un último punto. Hasta la década pasada (el 2015) existieron los llamados “medios sensacionalistas” (o también conocidos como “diarios populacheros”), eran periódicos fundados y administrados desde la elite neoliberal con clara ideología de derecha pero que por motivos de marketing han querido ganarse al público de estrato popular (o también denominados como "la gente del vulgo", "la gallada" o "el perraje", ligado mayormente a ciudadanos... "ordinarios"). Estamos hablando de “Las Cuarta” (del grupo COPESA, “La Tercera”) y “Las Últimas Noticias” (del grupo “Edwards”, “El Mercurio”).

A esto sumemos que en la década del 80’ COPESA de alguna manera adulteró el concepto de “cultura popular” creando el diario “La Cuarta” para instalar así una serie de modismos “chabacanos” y que por un buen tiempo han querido ganar espacio dentro del denominado “folclore urbano”. Pero siempre con una marca ideología machista, y es que por harto este medio el medio ha puesto en sus portadas cuerpos con poca ropa de mujeres (motivaban la calentura).

Pero en algún momento se pegaron la cachada, dado que La Cuarta empezó a cambiar su formato desde el 2017 mostrándose como un medio mucho más sobrio o recatado que antes. Hoy pasado el 2020 estos medios han perdido lectoría, porque la gente se ha dado cuenta que su única función era “distraer a las masas” y no precisamente informar. La gente está informándose a través de Redes Sociales, sumándose que los medios más leídos e influyentes son los portales digitales.  Al menos las chicas en “paños menores” ya pasaron un poco de moda ¡en buena hora!. 

 ¡Ya! Vamos a la parte seria de este cuento.

Hace algún tiempos nos hemos puesto a analizar con otra colega periodista un brutal titular del Diario La Cuarta, que de hecho fue el primero que les hemos compartido en este texto. Así, la del criminal de los “anticuchos”.

Esta persona, quien por cierto era mujer, dijo que no le podía dar pena que ese medio desaparezca. A primera vista ya resulta asqueroso leerlo, técnicamente el error aquí es el mal enfoque periodístico que le daban al hecho ya que aquí un criminal peligroso mató a su pareja y posiblemente como consecuencia de “un arranque que le habría dado” (nada justifica el delito, claro). 

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 Si agregamos un poco de empatía con la víctima, el títular debiera decir así: “Monstruo se puso con el alza de femicidios, ¡ESTO NO TIENE NOMBRE!”. Si las cifras de este tipo de crimenes aumentan en Chile son datos que debieran preocupar a la sociedad, entendiendo que el acto es cruel, inhumano y bestial.

Y aunque cualquier periodista no hubiese redactado ese titular, en la práctica bien sabemos que “donde manda capitán, no manda marinero”. Cada medio tiene su propia editorial, por lo que un reportero o redactor de 25-30 años que recién entra a trabajar para el diario no tiene otra opción que acatar las pautas indicadas por el editor. Como el campo laboral del periodista está en preocupante crisis (algo que a los medios jamás les convendría reconocer en público), el chico novato simplemente obedece para cuidar tanto “la pega” como el sueldo. Es la única manera de agregar experiencia laboral al Currículum Vitae, que tanto te exigen cuando en el futuro (dentro de 5 años) te toque buscar un nuevo empleo. 

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 El medio es absolutamente responsable de dichos titulares, considerando además que antes de lanzar las noticias al kiosco son previamente leídas por el editor (Quien no solo pautea los temas, también revisa y corrige a sus redactores subordinados). Con esta colega hemos llegado a la conclusión de que el titular cruel del “anticucho” la habría parecido gracioso y llamativo al jefe de prensa. Aquello sería su morbo, y la ética….¿qué es eso? ¡no me acuerdo!

Otro hecho policial que impactó a nuestra sociedad chilena fue el abuso de Martin Pradenas a Antonia Barra en el sur. Cuando el victimario fue llevado en su oportunidad a prisión preventiva (años atrás), han habido locutores de radios comunitarios que lo llamaron “el pobre cabro” sin decir ni una palabra referente a la victima, joven quien se quitó la vida tras abusos reiterados por parte de quien fuera su pareja.

Y esta misma colega agrega en la conversación otro titular del Diario La Tercera: “¿Cómo pasa Martín sus días en la cárcel?”. A ella no le pareció ese tipo de informaciones, entendiéndose que el criminal debe cumplir con la justicia y nuestra preocupación debiera centrarse más bien en la familia de Antonia.  

Tras haber compartido todos estos ejemplos, sólo queda recordar que el buen cristiano debe sentir y comprender el dolor ajeno. Muchas de estas noticias trataban de crimenes, de vidas que se van por culpa del arranque machista. De relaciones tóxicas donde predomina cualquier cosa, menos el amor. Para la religión, matar es pecado. Para la justicia, el asesinato es delito (crimen). Pero redactar titulares con el propósito de hacer “lavados de imágen” bastante sutiles en favor de estas bestias, son prácticamente ACTOS CON FALTA DE CRITERIO Y SENTIDO COMÚN. 

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