En un barrio cualquiera, era Lunes por la mañana cuando Daniel va a casa de sus vecinos.
Daniel gritaba Aló, en la vereda.
-
Daniel:- ¡Alooooo….!
Anastasia:- (Sale de su casa) ¡Ah
vecino! ¡Hola! ¿¡Como le va!?
Daniel:- Aquí pue’ vecina. Le tengo
noticias para usted, y su familia.
Anastasia:- A ver.
Daniel:- No sé si le han dicho, pero
desde que asumió el nuevo alcalde yo estoy ejerciendo como Director de la OMIL
en la municipalidad.
Anastasia:- ¡Ah si! Algo me dijo su
conviviente, ¿¡Le ha ido bien si!?
Daniel:- Si, digamos….que ayudar a
las personas mas vulnerables de la comuna también me da sus recompensas.
Anastasia:- No, lógico ¡Por supuesto!
Daniel:- Hablando de recompensas, y
de personas vulnerables. Le decía que tengo buenas noticias para usted, y toda
su familia.
Anastasia:- Ah, si ¡de veras! Ja ja….y…..¿¡Se
puede saber que me tiene que contar!?
Daniel:- Vecina, con el alcalde cuya
relación es bien estrecha….ambos decidimos darle empleo a usted, a su papá, a
su hermano y a su hijo que igual es un joven de 20 años ¿¡No cierto!?. Si no me
equivoco.
Anastasia:-¿¡ Empleo !?
Daniel:- Claro. Digo,..... para que
ustedes estén despiertos todas las noches hasta las 3 de la mañana, más encima con la luz
prendida en el antejardín….¡Gastando innecesariamente electricidad!....¡Vecina! Yo me imagino que la única explicación lógica para eso, es que no tienen nada que
hacer al otro día….para que anden “webeando” hasta tan tarde.
(Portazo en la cara).
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