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lunes, 15 de enero de 2018

Vacaciones de verano 2018: Salir a la playa de Lirquén o a La Cata también son un panorama....

Playa de Lirquén, a tres kilómetros al norte de Penco (Chile)
COMPARACIÓN TURÍSTICA 2.0: Playa de Lirquén vs. Playa La Cata

1- Playa de Lirquén, el balneario “popular” de la Costa Norte Penco – Tomé

Playa de arena gris, aguas tranquilas y muchas algas, apta para el baño, con boyas de protección (zonas de baño) en temporada estival. Quienes lleguen en vehículo pueden estacionarse en la caleta, aunque ubicarse allí no es gratis (Hay que cancelar unas monedas a quienes cuiden los autos). 

Ubicada a pasos de los rincones referentes de Lirquén (Plaza, parroquia, barrio chino, restaurantes y paraderos de buses). ¿Cómo llegar? Si usted se encuentra en el paradero de buses ubicado en la plaza lirquenina –Calle Alcalde René Mendoza-, debe entrar por la ancha calle (-al frente suyo) que va en dirección hacia la entrada vigilada al Puerto (caseta de seguridad). Pero en realidad solo debe cruzar la línea de ferrocarriles, y antes del recinto portuario usted debe doblar a su derecha (Mirando hacia el norte).

En condición de peatón tiene dos alternativas para entrar a la playa: a) Caminar por un angosto sendero colindante con el recinto portuario, que lo lleva hacia el sector sur de la playa. b) Cruzar el puente sobre el Estero Lirquén, y luego cruzarse todo el estacionamiento (-de la caleta) para bajar a la arena mediante escalas, en el sector norte de la playa.

Mientras que en condición de conductor particular (Si es que viene en vehículo), sólo tiene la opción de cruzar el puente para así entrar al estacionamiento asfaltado. La vereda que colinda con el ingreso fue recientemente remodelada con iluminaria, basureros y asientos el pasado 2014.

Es una playa mínimamente equipada. Quitasoles de paja (para la sombra), basureros, baños públicos (en el estacionamiento), hasta un monumento católico a San Pedro es posible encontrar en el lugar (El patrono de los pescadores artesanales). Una playa muy concurrida durante el verano, sobre todo en fines de semana.
El veraneante logra sentirse bienvenido en el lugar después de un día tomando sol o bañándose en el mar. Los restaurantes y puestos de comida cercanos a este balneario están disponibles en todo horario para atender a sus comensales (A la hora que el veraneante quiere y estime conveniente, puede degustar de la mejor gastronomía marina). En el comercio lirquenino hay muchos almacenes de barrio para degustaciones menores (Un pan y una tajada de cecina a $ 250).
Un rincón ideal para el desestrés, y de buen oleaje en el mar. Los veraneantes reciben un muy buen trato por parte de los comerciantes. Aire fresco. No se ve acumulación de algas a la orilla del mar. Y lo más interesante de todo….¡Esta playa se encuentra totalmente aislada del ruido de los autos! (Ya que gran parte de este balneario colinda con el Puerto de Lirquén), una preocupación urbana menos… mientras se descansa.


2- Playa La Cata, el rincón donde el campo y “la calma” se unen con el mar
El sector de La Cata se ubica a diez minutos de caminata, saliendo por la Playa de Lirquén hacia el norte.
Playa rocosa, de aguas tranquilas, y rodeado únicamente de entornos naturales. Apta para el baño, ubicada en la periferia rural de Lirquén (Donde antiguamente se ubicaba la línea de ferrocarriles con destino a Tomé). Se ubica posterior a la Playa de Lirquén.
En el lugar también se ubica un paseo para senderistas. De hecho la Municipalidad de Penco remodeló el sendero que está por sobre la huella de la ex línea de trenes. No hay acceso para vehículos. En La Cata -de hecho- hay una terraza ancha, que está construida con tablones de madera.
La zona de baños está conformada por pozos rodeados de roqueríos costeros, se le recomienda al veraneante tener cuidado por donde caminar (pisar). Muy visitada por lirqueninos, pencones y visitantes forasteros. Incluso por jóvenes ecologistas y neo hippies.
La Cata ha sido varias veces escenario de diversas caminatas y actividades ligadas al senderismo, convocado por agrupaciones ecologistas que desde el 2015 han protestado contra un proyecto frustrado de gasoducto a instalarse en el sector (Octopus Terminal GNL). Aunque las autoridades decidieron finalmente que la gestión industrial sería trasladado a Talcahuano, dichas actividades han logrado difundir mas sobre el lugar a los aficionados de otras comunas quienes entusiastas buscan participar de una aventura ecológica e impresionante.
Advertencia: El sendero no cuenta con iluminación, no es recomendable ir de noche.
Es un lugar muy silencioso, con entorno relajante a la vista. La playa cuenta con “rinconcitos exclusivos”, que de hecho se encuentran en la ancha terraza de madera gestionada por la Municipalidad de Penco. Con espacio libre para el relajo legal…¡El que sabe sabe! (Casi nula presencia de Carabineros durante el día). La Cata es más que ideal para el desestrés, lugar que además cuenta con aire fresco. Otro de los puntos a destacar es que La Cata está totalmente aislada del ruido de los autos, dado que los senderos son demasiado angostos lo que complica a un conductor de vehículos transitar por el lugar (Zona selectiva para los peatones).
Es un lugar muy bucólico, no intervenido pese al repentino paso de aventureros quienes caminan mas lejos de La Cata ya que pretenden seguir hasta un sector denominado “El túnel” (Que es el límite intercomunal entre Penco y Tomé, por la costa). Por último, si bien se pueden presenciar gaviotas en La Cata las aves no son tan invasivas como en otros sectores (Se ven volar a una cantidad prudente y normal de gaviotas en este sub-urbano sector).
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Bonus Track
1- Dichato, el lugar de la “costanera jardineada”
Dichato es un concurrido balneario, con una extensa playa  de arenas blancas en forma de media luna, ubicada en el fondo de la hermosa y cerrada Bahía de Coliumo.
Es un lugar de gran belleza, con una variada gama de actividades en verano (como la práctica de deportes náuticos).
            La costa dichatina atrae por su silencio y relajo (el entorno es silencios salvo que a Dichato llegue una gran cantidad de veraneantes en un día), casi no hay basura en la playa, la panorámica marina (o mirar el horizonte del mar) motiva el desestrés que el turista con ansias busca, los visitantes aquí se sienten bienvenidos, hay puntos donde el paisaje y la naturaleza combinan (sobre todo en asientos o rinconcitos solitarios donde mirar en completa paz) y la arena de esta playa es blanca. Se siente el cantar de los pajaritos (aves).
Por lo general el veraneante sabe comportarse en Dichato y por eso que no es recurrente ver un abundante patrullaje policial, los locales (picadas) abren todo el día, hay comercio para todos los bolsillos, espacio amplio en la playa, los comerciantes aquí dan un muy buen trato a sus clientes y consumidores, aire fresco, no se necesita mirar para los dos lados al cruzar la calle ya que los autos andan a una velocidad prudente (Y aquellas camionetas grandes que metan ruido por el solo hecho de transitar sólo son una minoría, ¡se nota que esos conductores escandalosos… no son dichatinos!).
Ah, y la costanera no es cualquier rincón, debiera definirse como una costanera-plaza ya que hay abundantes áreas verdes entre la vereda peatonal y la calle. De hecho, los ciclistas aquí pueden andar –manejando su bici- como si estuvieran dentro de un verdadero “Edén”, ya que las ciclovías aquí están rodeadas de jardines y arboles. También hay pistas para los “Skaters”.
No por nada, Dichato es la localidad balneario del más alto nivel tanto en toda la Octava Región como en el Sur de Chile.
Nota con que se evalúa la playa: 6,0 – BUENA
Playa de Dichato


Elemento
Bueno, malo
Observación
Lugar silencioso
Si – BUENO
Aunque el silencio puede verse interrumpido dependiendo de la cantidad de veraneantes
Cantidad de basura en la arena
NO- BUENO

Entorno relajante a la vista
SI - BUENO

El veraneante se siente bienvenido
SI - BUENO

Rinconcitos “exclusivos” de la playa (o tranquilos)
SI - BUENO
Aunque más en el lado norte de la costanera (Donde están las plantaciones de pinos), y en una plazoleta-mirador ubicada en Caleta Villarrica.
Playa de arenas blancas
SI - BUENO

Espacios libres (relajo legal)
SI - BUENO
No es recurrente el patrullaje policial, pero el veraneante sabe comportarse.
Disponibilidad de horario en picadas costeras
SI - BUENO
Al horario que uno llegue, siempre está abierto –a lo menos- un restaurante.
Batucadas y/o Música afro-brasilera
DE VEZ EN CUANDO
Jóvenes que tocan batucadas para alegrar el ambiente (Música brasilera)
Precios económicos para degustaciones menores (Un pan corriente y una tajada de cecina a $ 200, almacén de barrio)
SI - BUENO

Desestrés (Entorno silencioso)
SI - BUENO
En los asientos del lado norte de la Costanera.
Amplitud en el espacio de la playa
SI - BUENO

Oleaje
NO - MALO
Oleaje suave
Buen trato por parte de los comerciantes
SI - BUENO
Trato atento y hasta casi cariñoso.
Aire fresco
SI - BUENO

Acumulación de algas y/o guano a la orilla del mar (olor)
SI - MALO
Sobre todo en el sector norte de la costanera
Nivel de velocidad (o ruido) en el tránsito de vehículos
PRUDENTE - BUENO
Rara vez se siente alguna camioneta ruidosa, que transite por la costanera.
La mayoría de los conductores jamás maneja a alta velocidad, ¡conductores muy prudentes!




2- “La República independiente de Playa Negra” (El pedacito sur de la Playa de Penco, con sello propio)
Playa Negra en realidad es el rincón sur de la Playa de Penco. El lugar está conformado por arena gris, suave oleaje y tranquilas aguas, aptas para el baño.
Se le denomina así por poseer sus propios rincones que lo distinguen con el resto de la playa de Penco: pub, restaurantes, estacionamiento abierto y gratuito, zona para camping y picnic, e iluminación en la noche. Playa pública.
Cuenta con espacios libres para el relajo legal, hay puntos donde no frecuenta mucho llegar la policía, sobre todo en el rincón colindante con las ruinas del Ex Muelle Refinería que es conocido también como “el cerrito” (Una colina abandonada que se ubica a la altura de calle Talcahuano, al frente del Liceo Pencopolitano).
De vez en cuando vienen grupos de jóvenes, quienes por iniciativa propia tocan música afro-brasilera para alegrar un poco más el ambiente. La municipalidad no dispone de parlantes en el lugar, para colocar música.
A la entrada de Playa Negra –Por calle San Vicente- se ubican varios almacenes de barrio (negocios), con precios baratos para degustaciones menores (Un pan y una tajada de cecina a $ 250).
Lo bueno es que esta playa desestresa cuando el veraneante se ubica sentado en la arena, frente al mar. Aunque debe asegurarse que nada lo desconcentre (o no sea interrumpido) mientras se quede de frente mientras mira y observa el horizonte marino.
El espacio de la playa es amplio. Hay un buen trato por parte de los comerciantes que trabajan cerca de Playa Negra, aunque psicológicamente suelen ser “bastante interesados” (Casi como una simpatía fingida).


3- La Playa de Penco, el balneario que pasado las 9 PM es bohemio
Es una extensa playa de arenas grises con un oleaje moderado y tranquilas aguas, aptas para el baño, que la hacen ideal para poder ir a disfrutar de los días de sol junto a la familia y/o amigos, en el sector además existen variados puestos que venden productos gastronómicos de la zona, centrados en los pescados y mariscos (incluso comida rápida, cerveza) para poder disfrutar de una grata tarde.
El veraneante se siente bienvenido en la Playa de Penco, y ha elegido un buen lugar para desestresarse. Las picadas costeras -que están en los alrededores- se encuentran disponibles en todo horario. Varios comerciantes ofrecen degustaciones menores (como cabritas o  palomitas de maíz) que son muy baratos para el bolsillo. El espacio del balneario es muy amplio.
Y por ultimo, el nivel de velocidad en el tránsito de vehículos es prudente. Con esto es seguro cruzar la calle antes de llegar a la playa.




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