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miércoles, 24 de julio de 2024

Relato: Un Café para el Dalai (-Lama)

 

Título en sarcasmo y parodia al nombre de una conocida canción del músico chileno Fernando Ubiergo, "Un café para Platón" 

¡Ya!

Vamos a la historia SERÁ MEJOR...

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Un día Daniel iba caminando por el centro de la ciudad, cuando en el camino se encuentra con un sacerdote budista. 


Daniel:- ¿Profe? ¿Es usted?

Sabio:- Hola Daniel, ¿Qué es de tu vida hombre? (Y lo abraza) 


Daniel:- Aquí, ahora voy a una entrevista de trabajo. Llevo meses buscando peguita....¡Ya! ¡Lo debo dejar! ¡Nos vemos! 

Sabio:- Que te vaya bien 


SEGUNDOS DESPUÉS

Luego Daniel se acordó de algo en la vereda, y era éste el instante de aprovechar una conversa con el sacerdote. Tenía una duda que lo inquietaba mucho, y quería que el sabio se lo pudiera aclarar. 


Daniel:- ¿Profe?

Sabio:- Dime 


Daniel:- Oiga, sabe que me acordé de algo que me deja inquieto

Sabio:- Si, por supuesto. Te escucho. 


Daniel:- Mire, lo que pasa es que...

Sabio:- ¿Porque no hacemos algo Daniel?


Daniel:- Si, digame

Sabio:- ¿Te invito a un café capuccino en una cafetería de aquí a la vuelta? Yo invito 


Daniel:- Bueno ya, demosle 

-

MINUTOS DESPUÉS

Ya sentados ambos en una mesa de una cafetería, al frente de la plaza, empezaron a platicar. 

Sabio:- Ahora si hijo, cuentame

Daniel:- Usted sabe que yo como muchos nos conectamos a las Redes Sociales, ¿¡no cierto!?


Sabio:- Asi es, no me digas que Twitter te está envenenando. Recuerda que esa red social es muy tóxica

Daniel:- No precisamente, pero desde que acabó la pandemia he visto que la gente se ha visto weona en esa plataforma 


Sabio:- Explicate 

Daniel:- Bueno, con todo esto de que ganó el Rechazo, de que el Boric está abandonando al pueblo, y de que el Giorgio Jackson robó cualquier cantidad de plata en el último tiempo, la gente vuelve a desconfiar de la política para ponerse a ver los Reality Show en televisión- 


Sabio:- Así parece. También creo que hemos retrocedido al año 2010. ¿Y que es lo que te inquieta hijo?

Daniel:- Lo que ocurre es que ahora en Twitter hay gente que pone comentarios románticos, fogosos aunque medio pecaminosos también ¿ah?-


Sabio:- ¡Vaya!

Daniel:- Claro. Leí uno que decía "Yo soy una mujer de 40, me gusta un chico de 20 ¿Qué hago?"


Sabio:- ¿Y acaso nunca has tenido una polola virtual? ¿Mmmm? Eres joven también, y mereces pasarlo bien 

Daniel:- Bueno, quizás cuando iba al liceo...en el año 2002 mas menos. En esa época en que el portal Terra tenía un sitio de Almas Gemelas 


Sabio:- Bueno, y....¿porque no disfrutas?

Daniel:- Es que voy a otro punto profe. Siento que con ese tipo de preguntas tiradas para la cama (sexo), simplemente son weones a quienes les gusta llamar la atención 


Sabio:- Bueno, si es así. Creeme que ese tipo de usuarios existen por culpa tuya, y también por culpa de muchos más-  

Daniel:- ¿Cómo? ¿Por culpa mía?, perdon pero.... ¡je je je!...... ¿¡Qué está hablando oiga!?


Sabio:- Así es. Te explico....Mientras te quejas de que en X hay gente que le gusta llamar la atención ¿No cierto?....Pero ¿no te has preguntado en algún momento porqué lo hacen?

Daniel:- Será porque son weones ociosos y están aburridos


Sabio:- Yaaaa......pero ese aburrimiento es consecuencia de algo. Recuerda esto, causa y efecto....causa y efecto-

Daniel:- ¿Ah si? 


Sabio:- Así es. ¿Cuándo fue la última vez que le respondiste su tweet?

Daniel:- Mmmmm......en verdad nunca le respondo sus tweets


Sabio:- Perfecto. No te quejes después porque usa el doble sentido para llamar tu atención. Ahora ¿Con su permiso? Me debo retirar....Que pases una linda tarde ¡Chao!

Daniel:- Chao 


Y ese punto en verdad dejó perplejo al Daniel, quien no logra tomarse el café servido en la mesa, tampoco se mueve de la silla. Con la boca abierta se queda pensando en todo lo que el sabio le dijo, con los ojos perplejos se tapa la boca. Está muy pero muy pensativo. 


Van pasando los minutos, y Daniel empieza a hablar solo.


Daniel:- Y una vez más, el pelao cabezón me ha conmovido. Estoy en Shock! 


De repente se le acerca el mesero. 


Mesero:- Señor, ¡su cuenta!

Daniel:- ¿Cómo?....¿Cual cuenta?


Mesero:- La cuenta de los dos capuccinos que usted se sirvió con su abuelito, son $10 mil las dos tacitas más la propina 

Daniel:- Momento! Déjame decirte de partida...El caballero que se acaba de ir no es mi abuelito!!  


Mesero:- Ah no?

Daniel:- No, no es mi abuelito. Es un viejo sinverguenza que me acaba de estafar, me dijo que me iba a invitar a un café, y resultó que el viejo CTM se lo tomó gratis !!- 


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