¿Recuerdan que tiempo atrás, para homenajear los 20 años del debut de la Universidad de Concepción en Primera A, hicimos una especie de reseña?
Pero con el correr de los meses hacían las medias goleadas (Como los 8 goles que le hicieron alguna vez a Palestino), además tenían “de hijo” a la U de Chile, se lucieron con la jugada de rabona, recibieron a Iván Zamorano con un Collao lleno (Cuando Bam-Bam era colocolino), terminaron la temporada peleando los primeros puestos, en menos de un año aseguraron cupo a la Copa Libertadores, y finalmente en 2004 (al año siguiente) también irían a la Sudamericana. ¿Qué equipo chico hace eso? Fue toda una anécdota. Y ese homenaje abarcó todo eso que mencionamos.
-
En ese mismo tiempo, y sobre todo para el segundo semestre del 2003 cuando este club daba que hablar en la prensa deportiva, se decidió por vender la entrada en precio único a $1.000 democratizando así el futbol de la zona (Claro que eso se hacía solamente cuando el Campanil jugaba con rivales que estaban a su altura: otros equipos de provincia o santiaguinos de poca convocatoria como Audax Italiano o Palestino). ¿En que consistía eso? Como en 2003 aun se compraban las entradas en formato papel (boleto), habían dos partes donde adquirirlas...en el mismo club deportivo (que en ese tiempo tenía su oficina en calle Caupolicán, entre Barros Arana y O’Higgins) como también en algunas mesas que se ubicaban en pleno Paseo Peatonal. Como olvidar que en la denominada “Parada de los tontos”, al frente de la plaza, siempre habían promotoras esperando nuevos socios para estos equipos de fútbol. Allí con solo MIL PESOS te comprabas la entrada para ver el partido un fin de semana.
Algunos de dichos partidos eran el que jugaron ante Coquimbo Unido, en la última fecha de la fase regular, donde la U de Conce aseguró su insólito cupo para la Copa Libertadores. Semanas después venían los Play Off, y como el estadio de Concepción estaba siendo remodelado para el posterior Preolímpico Sub-23 debieron jugar sus últimos partidos de local en el entonces viejo estadio de Las Higueras donde jugaba Huachipato. Sea en partidos ante Rangers o Cobresal, el complejo deportivo también se llenó gracias a la forma de como se democratizaron esos partidos.
Sólo para terminar, el último partido del Campanil ante Cobresal en Talcahuano fue irónico y contradictorio. Vean. Fue un duelo de ida y vuelta (Por Play Off), el primero de dichos partidos se jugó en El Salvador con triunfo nortino. Posteriormente vino la revancha de Diciembre en Higueras, cuando en los 90’ minutos el local había ganado 5-1. Con ese resultado, el duelo quedaba empatado y sólo faltaba un gol de oro para sellar el paso a semifinales. Lamentablemente, y por un grotesco descuido de la defensa universitaria, vino el gol de oro a favor de Cobresal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario