El
socialismo es el más noble de los ideales políticos, porque se trata de una
doctrina cuya esencia es la búsqueda de facilidades y soluciones, para aquellos
ciudadanos que mueven a un país: LOS TRABAJADORES. Pero en los últimos años
(con justa razón) muchos chilenos ya desconfían de la política, ¿la razón? esto
es consecuencia de que el perfil actual de un político socialista es la de tipo
reformista. De ahí, los vínculos entre la presidenta
Bachelet con el mundo empresarial y en dos sus gobiernos.
La
verdad amigos, ¿Qué sacamos con saber teóricamente que el Sistema Tripartito de
Reparto Solidario beneficia más a los chilenos en el tema de las pensiones que
las AFP? ¿¡Mmmm!? ¿Qué sacamos con tener conciencia de que una forma eficaz de
prevenir el consumo de drogas en nuestros jovenes es la creación de espacios
para el deporte o la cultura en cada población? Por un lado, es el ciudadano
con iniciativa y ganas quien debe empoderarse. Pero también están aquellos,
quienes supuestamente cuentan con “facilidades” (y contactos) para crear dichas
instancias ciudadanas. Llevar a la práctica esos proyectos. ¿Se entiende o no? Bajo
la óptica del marketing, las iglesias evangélicas están abriendo sus puertas
(Bien sabemos que es para ganar feligreses), ¿Por qué un partido político
tendría que estar distante de la gente?
Si
el principiante no sabe redactar proyectos, ¡orientémoslo! Si el novato quiere sugerir un cambio para su
comuna, pero no sabe por dónde partir para concretarlo ¡orientémoslo! Si no
abrimos las puertas para la capacitación cívica, muchos de los cambios que
queremos no se van a concretar y sólo lograremos que la gente se quede en la
ignorancia (y en la pasividad) al momento de promover un cambio, siempre en son
del sentido común.
Lo
que hace la derecha es mantener una actitud aparentemente horizontal con la
clase media y los pobres (En realidad, es un trato patronal encubierto), con el
único fin de contenerlos emocionalmente.Pero ¡bien
sabemos! que en el Congreso aprueban proyectos de ley que más bien perjudican
al país, más que favorecerlo. ¿¡Y dónde está el enfoque social del socialismo
chileno!? Está bien hacerse una autocritica, y replantearse ¿Qué debemos hacer
para recuperar la confianza de la gente?
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